Esta debía de ser una entrada para comentar nuestra última escalada al pico del Penyagolosa. Una montaña sagrada y mágica en las últimas estribaciones del sistema Ibérico. Pero será porque estás convaleciente y noto tu propia extrañeza al no entender porque te faltan las fuerzas, por lo que quiero decir al mundo entero a través de nuestro blog que estoy en deuda contigo, por todo lo que me estás dando y todo lo que espero me sigas dando. Por ser el catalizador de que me redescubra a mí mismo, de que vuelva a quererme, de sentirme bien. Por estar siempre a mi lado, para subir montañas, para pasar la tarde en casa, para aguantar mis malos ratos. Por entender como me siento nada más verme y saber lo que más necesito en cada momento.
Y quiero que sepas, que aunque se que muy pronto volverás a estar bien y a ser el mismo de siempre, que siempre cuidaré de tí y que procuraré devolverte una pequeña parte de todo el cariño que tu me estás dando.
Y que me encanta redescubrir la naturaleza junto a tí.
Os quiero a los dos....
ResponderEliminarQue palabras más bonitas, seguro que Rex se va a recuperar pronto. Animos a los dos!
ResponderEliminarUpsss mi amigo Rex convaleciente??? de qué??? si pareces invencible, yo creo que lo eres.
ResponderEliminarTe imagino tan sabio, tan fuerte... como tu amo, me da que sois tal para cual. Se os puede aplicar aquello de tanto monta, monta tanto. Asi que ánimos a los dos que os necesitamos para que nos hagais sopesar el valor de nuestra convivencia.
Feliz Año.
Me tenéis en ascuas Desdichado, espero que la falta de noticias sean buenas noticias (como reza el dicho: pas de nouvelle, bonne nouvelle).
ResponderEliminarEspero que pronto podamos ver otro post de Rex brincando por el monte!
Un abrazo a los dos!