Remember me Thursday

La fotografía es de una manifestación celebrada ayer en Bucarest (Rumanía) por el cambio de una ley que permite matar a los perros callejeros por parte de las autoridades. Es de VADIM GHIRDA/AP

¿No os dan ganas de abrazar a vuestro schnauzer?
Me muero de ganas de abrazar a Rex. El hermano Pacíficus.

Ser Schnauzer Standard

Ser Sociable. La procedente del lobo. Vinculación Amichien.
Ser Cariñoso. Si el resto de la manada familiar te pone mala cara, tranquilo, siempre te quedará tu schnauzer.
Ser Juguetón. Para jugar sintiéndote como el buen salvaje.
Ser un buen Guardián. Nunca viene mal. Es un valor añadido. Está genéticamente preparado.
Ser un buen Compañero. De los que nunca fallan. Yo tengo pocos así.
Ser un buen terapeuta de conducta. Reconozco que cada día me parezco más a mi perro.
Ser un buen senderista. Aporta todas las cualidades anteriores, destacando la seguridad, mientras camina a tu lado, decidas donde decidas ir. Escalará junto a ti las más altas montañas, y descenderá contigo hasta el mismísimo barranco del Infierno, sin cuestionarlo.
Ser un perro polivalente. En términos médicos sería como de medicina general. 
En definitiva, el schnauzer mediano, es de profesión un tipo duro, pero con un gran corazón y una gran sensibilidad, que da lugar a su tremenda fidelidad por su familia y a su eterno carácter juguetón.

El guardián entre el centeno

El escritor J. D. Salinger juega con su perro en una imagen sin fechar. / PAUL FITZGERALD (AP)

Parece que los tipos raros encontramos un amigo perro. Quizá sean los únicos que nos aguantan. Quizá sea que a los tipos raros no nos gusta demasiado la gente.
Salinger jugando con su perro, que parece un schnauzer standard negro. Me veo a mí mismo jugando con Rex. Les encanta jugar a los schnauzer. No cumplen años en lo que respecta al juego.